LOGROÑO, 11 Oct.
La Policía Nacional de La Rioja ha detenido en Logroño a una mujer de 38 años de edad por falsificar un total de 178 recetas médicas, procedentes de facultativos del propio Logroño, Pamplona o Soria, con las que llegó a conseguir más de 10.000 pastillas de fentanilo en siete farmacias situadas en ciudades cercanas a la capital riojana.
Esta historia de fraude en el sistema de salud de La Rioja ha salido a la luz gracias a la denuncia de un médico cuyos datos personales se utilizaron indebidamente para adquirir el medicamento ACTIQ 200. Según la Jefatura Superior de Policía de La Rioja, el médico presentó su denuncia ante las autoridades locales, poniendo en marcha una serie de investigaciones que han culminado con el arresto de la mujer responsable por falsedad documental.
Las alteraciones realizadas en las 178 recetas fraudulentas iban desde la fecha de prescripción hasta el número de envases y la firma del médico. Además, la mujer también se apropió de recetas legítimas de otros médicos, falsificándolas por completo. El medicamento ACTIQ 200, un derivado de la morfina conocido como fentanilo, solo se puede obtener con receta médica y se debe prescribir un envase o caja por cada receta, con un máximo de tres recetas al día y con un intervalo de tiempo de aproximadamente veinte días.
Según fuentes policiales, es común que los médicos dejen en blanco el espacio destinado a especificar la cantidad de unidades a prescribir, asumiendo que se trata de una sola unidad. La mujer se aprovechó de esta práctica para escribir un número desproporcionado de envases en las recetas fraudulentas.
La detenida acudía a distintos médicos y les indicaba que su médico habitual estaba de vacaciones o de baja, justificando así la necesidad de obtener más recetas. Cada médico, sin cuestionarla, le prescribía la medicación, ya que la mujer presentaba un informe médico apuntando a múltiples dolencias.
Se ha descubierto que al menos catorce médicos de Pamplona, Logroño y Soria le habían proporcionado recetas de este medicamento. Tras el análisis de todas las recetas y la información disponible, se estima que la mujer habría adquirido más de 10.000 pastillas de ACTIQ 200, dejando claro que su objetivo no era la venta, sino el consumo personal. Se estima que esta mujer habría consumido un promedio de 10 comprimidos por día.
Desde la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) se hace hincapié en la importancia de respetar las condiciones de uso autorizadas para minimizar los riesgos de abuso y dependencia de los medicamentos que contienen fentanilo de liberación inmediata.
Es importante destacar que el fentanilo es un potente analgésico opioide que solo se receta para el tratamiento del dolor irruptivo oncológico en adultos.
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