"Desde el momento en que escuché la noticia, lamenté mi falta de intención"
Los acusados del crimen en el Parque del Ebro han expresado su arrepentimiento durante la sesión del juicio. Según uno de ellos, se arrepienten desde el primer momento en que supieron lo que habían hecho, alegando que no tenían intención de cometer un delito tan grave.
El juicio, que se lleva a cabo mediante jurado popular, ha alcanzado un acuerdo entre las partes, ya que los acusados reconocen los hechos. Sin embargo, el proceso continúa debido a la gravedad del delito. Durante la comparecencia, los cuatro acusados han respondido a las preguntas del fiscal y sus abogados, ejerciendo su derecho a no contestar a la acusación particular.
Los acusados han relatado cómo habían estado consumiendo alcohol, marihuana y cocaína durante varios días, y afirman sentir un profundo arrepentimiento. Uno de ellos ha corroborado su declaración inicial, diciendo: "Vimos a un marroquí, fuimos a atracarle y salieron mal las cosas".
Antes de prestar declaración, se han mostrado imágenes captadas por una cámara de seguridad de la Biblioteca de La Rioja, donde se ve a los acusados llevando la bicicleta de la víctima mientras esta yacía herida en el Parque del Ebro. En las imágenes, se observa que incluso uno de los acusados, que tiene una discapacidad intelectual reconocida, realiza gestos de burla.
Posteriormente, los acusados han reconocido su presencia en las imágenes. A.F, que ha respondido de manera concisa, ha sido el primero en admitir su participación en los hechos y ha reconocido que él fue quien se llevó el abrigo de la víctima. Con 25 años, es consumidor habitual de drogas y alcohol, al igual que los otros acusados. Ha expresado un arrepentimiento considerable y ha pedido perdón a la familia del fallecido.
M.G ha relatado que pasaron toda la tarde consumiendo una variedad de sustancias y fumando marihuana mezclada con cocaína, una dinámica que llevaban a cabo desde hace varios días. Ha pedido disculpas de manera sincera y se ha revelado que su madre ha pagado una suma considerable para reparar, en parte, la situación como responsabilidad civil.
S.D también ha admitido los hechos y ha comentado que fuma veinte porros al día, además de consumir cerveza y ron. Sufre de una adicción grave. Ha expresado arrepentimiento desde el momento en que se enteró de lo sucedido, alegando que no tenía intención de que las cosas llegaran tan lejos.
Por su parte, S.I ha reconocido una frase que había pronunciado previamente: "Vimos a un marroquí, fuimos a atracarle y salieron mal las cosas". Ha mencionado que ha intentado rehabilitarse sin éxito en instituciones como ARAD o Proyecto Hombre debido al consumo de sustancias como el cristal y la cocaína. También ha recibido tratamiento para problemas de salud mental y tiene una discapacidad intelectual reconocida. Ha asegurado que se arrepiente todos los días y ha pedido disculpas sinceras, afirmando que nunca quiso que algo así sucediera.