Ecologistas en Acción de La Rioja ha denunciado que el Gobierno regional, a través de su Dirección General de Medio Natural y Paisaje, está llevando a cabo la construcción de pistas forestales en varios encinares de los montes de La Rioja Baja, específicamente en los montes públicos de Cornago, Bergasillas y Enciso.
Ante esta situación, el colectivo ecologista demanda la detención de estas infraestructuras, proponiendo en su lugar la implementación de un plan de restauración de las pistas ya construidas para favorecer su regeneración y prevenir la erosión del terreno.
Considerando la grave deforestación en los montes de La Rioja Baja, estos encinares representan los últimos bosques naturales de la región, lo que aumenta su importancia ecológica y su papel en la protección contra la erosión.
Ecologistas en Acción argumenta que estos bosques desempeñan una función protectora vital y tienen escaso valor comercial en términos de aprovechamiento de la madera, lo que no justifica la construcción de las pistas forestales de gran impacto visual.
En lugar de priorizar la conservación de estos valiosos bosques, se está siguiendo un enfoque productivista que busca justificar la construcción de pistas para futuras actividades de tala que alterarían el suelo forestal y aumentarían la erosión.
Algunas de estas pistas afectan a áreas incluidas en espacios naturales protegidos, como las Sierras de Demanda, Urbión, Cebollera y Cameros, Zonas Especiales de Conservación de Importancia Comunitaria y parte de la Red Natura 2000 de la Unión Europea, tal como se denunció en junio de 2024 en los municipios de Munilla y Zarzosa.
Dado que estos bosques naturales han sido designados como Hábitats de Interés Comunitario por la Unión Europea, es probable que estas acciones estén siendo financiadas con fondos europeos, lo que contradiría los objetivos de conservación comunitarios.
En este sentido, Ecologistas en Acción sostiene que la construcción de estas pistas forestales carece de justificación, ya que generan impactos paisajísticos significativos al atravesar bosques naturales con funciones protectoras claras, en un entorno de deforestación generalizada como el de La Rioja Baja.
Además de exigir la suspensión de estas infraestructuras, el colectivo propone la ejecución de un plan de restauración de las pistas ya construidas para facilitar su regeneración y prevenir la erosión del terreno, concluyendo así su postura al respecto.
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