El Ayuntamiento de Logroño está trabajando en la implementación de medidas para mejorar la seguridad en el entorno de la estación de autobuses. Estas medidas incluyen la creación de carriles exclusivos para buses, taxis y bicicletas, señalización inteligente y la reducción de velocidad.
El alcalde de Logroño, Conrado Escobar, y el concejal de Tráfico y Movilidad, Ángel Andrés, han presentado estas medidas que se anunciaron poco después de los avances en la subestación eléctrica de Cascajos.
Esta actuación abarca desde la rotonda de Avenida de Lobete hasta la rotonda de Miguel Delibes con Avenida de Colón, cerca de las estaciones de ferrocarril y autobuses.
El proyecto incluye carriles exclusivos para autobuses y taxis, señalización inteligente con captafaros LED y un sistema de sensores para activar señales luminosas de aviso tanto para peatones como conductores de autobuses.
Además, se limitará la velocidad a 20 km/h para el resto de los vehículos y se mantendrán las paradas de autobús y taxi actuales, así como plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida.
El alcalde destacó la importancia de mejorar la seguridad en la zona de la estación de autobuses, que es la puerta de entrada a la ciudad para muchos visitantes y residentes.
Estas mejoras se realizarán de forma paralela con otros proyectos para garantizar la accesibilidad y la seguridad en la zona. Se busca crear un entorno más seguro y accesible para todos los usuarios.
Escobar subrayó que estas mejoras no se detendrán aquí, sino que seguirán incorporando nuevos aspectos para reforzar el servicio y mejorar la estética y la conectividad en la zona.
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