LOGROÑO, 24 de junio.

La secretaria de Derechos Humanos y LGTBI del PSOE, Leire López-Davalillo, ha lanzado un apasionado llamado a la ciudadanía para que se sume a la manifestación programada para el próximo sábado 28 de junio en Logroño, en celebración del Día del Orgullo, subrayando el peligro de posibles retrocesos en derechos ya conquistados.

Durante una rueda de prensa, López-Davalillo subrayó la importancia del Día del Orgullo de este año, que marca dos décadas desde la histórica aprobación del matrimonio entre personas del mismo sexo en España, así como la posibilidad de que estas parejas puedan adoptar, un hito crucial en la lucha por la igualdad.

Recordó que este significativo avance se logró gracias a un gobierno socialista bajo la dirección de José Luis Rodríguez Zapatero, destacando que solo el Partido Popular se opuso a la iniciativa, con la excepción de Celia Villalobos, quien se atrevió a romper la disciplina de voto en apoyo a la propuesta.

La dirigente socialista también rememoró otros logros fundamentales impulsados por administraciones de su partido, como la 'Ley Zerolo', que establece principios de igualdad de trato y no discriminación, así como la Ley LGTBI nacional, avances que son reflejo de un compromiso ético con la justicia social.

“Estos progresos trascienden lo legal; demuestran que es posible construir un mundo mejor cuando se actúa con empatía y determinación”, concluyó, enfatizando la necesidad de seguir luchando y no dar nada por sentado.

No obstante, advirtió sobre un “peligro de retroceso” que ya se observa en otros países, señalando que en España este riesgo podría incrementarse si figuras como Abascal alcanzan posiciones de poder, lo que podría amenazar la estabilidad de los derechos adquiridos.

Así, instó a la ciudadanía a salir en masa a la calle este sábado, con la manifestación partiendo de la Plaza del Mercado de Logroño a las 20:00 horas, para defender la igualdad y celebrar la diversidad.

En cuanto a los retos aún pendientes en La Rioja, mencionó la creación de un Consejo LGTBI, la necesidad de elaborar una memoria democrática que visibilice el sufrimiento de aquellos que padecieron represión durante la transición y el “sexilio” que enfrentan las personas que habitan en zonas rurales, que a menudo se encuentran en situaciones más vulnerables que sus contrapartes urbanas.