LOGROÑO, 27 de julio.

En un paso significativo hacia la sostenibilidad, Correos está incorporando a su flota en La Rioja cuatro nuevas furgonetas eléctricas Renault Kangoo E-Tech, dedicadas a las unidades de distribución en Logroño, según ha comunicado la empresa a través de un comunicado oficial.

Con esta iniciativa, la compañía reafirma su compromiso con una movilidad más ecológica y eficiente, especialmente en el sector del reparto de última milla, donde el impacto ambiental es crucial.

Las furgonetas cuentan con una capacidad de carga útil de 600 kg y un espacio de hasta 4 m3, además de poder remolcar hasta 1.500 kg. Su diseño incluye una apertura lateral de 1,45 m, facilitando así la carga y descarga en espacios reducidos.

En términos de rendimiento, estos vehículos eléctricos poseen una autonomía de 300 kilómetros y pueden recargar 170 kilómetros en tan solo 30 minutos, gracias a su batería de 45 kWh y un cargador de 80 kW en corriente continua. Esto permite que cada furgoneta pueda recorrer alrededor de 12.000 kilómetros al mes sin necesidad de depender de combustibles fósiles.

En la actualidad, Correos ya cuenta con un total de 21 vehículos eléctricos en la capital riojana, que incluyen tanto furgonetas como motocicletas electrificadas, aumentando así su capacidad de reparto sostenible en la ciudad.

Respecto a las motocicletas, estas son ligeras y eléctricas, alcanzando una autonomía máxima de hasta 120 kilómetros. También están equipadas con un baúl de gran capacidad para facilitar el transporte de paquetes, así como sistemas avanzados de telemetría y geolocalización.

Las motos eléctricas incorporan un sistema que permite el seguimiento automático y el registro de su rendimiento, así como la capacidad de enviar alertas de forma inmediata al centro de control, garantizando un servicio seguro y eficaz.

Correos enfatiza que está lista para continuar con sus operaciones en todos los núcleos urbanos, adaptándose a las normativas y restricciones vigentes, mientras trabaja en su meta de que, para 2028, al menos el 25% de su flota de reparto sea eléctrica y el 50% utilice tecnologías alternativas.