LOGROÑO, 19 de noviembre.

La ciudad de Logroño ha dado un paso significativo hacia la mejora de la movilidad sostenible con la inauguración de más de 33 kilómetros de caminos ciclopeatonales. Estos nuevos trayectos, que conectan los barrios de El Cortijo, Valdegastea y El Cubo, fueron presentados hoy por el alcalde, Conrado Escobar, quien inauguró oficialmente las mejoras en una visita que celebró la iniciativa como un avance en la calidad de vida local. "Estos caminos no solo facilitarán la movilidad, sino que también evidenciarán y valorarán nuestro rico patrimonio natural e histórico", resaltó Escobar.

Junto a él, los concejales de Medio Ambiente, Jesús López, y Distrito Oeste, Laura Lázaro, participaron en la inauguración de este proyecto que requirió una inversión de 405.946 euros, financiada en parte por el Ministerio de Industria y Turismo, así como por los fondos europeos Next Generation. Esta colaboración resalta la importancia y el apoyo institucional hacia las iniciativas que fomentan la sostenibilidad y el desarrollo urbano responsable.

El alcalde subrayó la importancia de este proyecto que "no solo mejora la infraestructura, sino que también promueve un estilo de vida más saludable y activo". Con la correcta señalización y adecuación de estos caminos, se busca potenciar no solo el ocio y el deporte, sino también un turismo respetuoso con el medio ambiente y la riqueza cultural de la región.

Escobar se mostró confiado en que esta red de rutas se convierta en un elemento esencial, proporcionando a los logroñeses y visitantes la oportunidad de disfrutar de la biodiversidad y los diversos paisajes que rodean la ciudad. La intervención ha sido integral y ha abarcado desde la consolidación de caminos hasta la restauración de tramos deteriorados, mejorando la accesibilidad y la conectividad de estos barrios.

Además, se han acondicionado zonas estanciales en puntos de interés cultural y arquitectónico, reforzando el vínculo entre la comunidad y su entorno. Las actuaciones incluyeron también mejoras en la señalización y restauración ambiental, contribuyendo a la preservación de la zona.

El diseño del nuevo sistema de caminos incluye ocho recorridos principales que conectan las tres áreas principales. Estos ejes no solo son vitales para la comunicación entre los barrios, sino que también ofrecen opciones de exploración para peatones y ciclistas. Por ejemplo, la Vía del Cubo, que se extiende por 9,2 kilómetros y conecta con el GR-99 del Ebro, representa solo una de las muchas rutas que fomentan un estilo de vida activo.

Asimismo, se han establecido caminos secundarios que, aunque más cortos, suman más de 3 kilómetros adicionales, aumentando así la interconexión entre las principales vías. Uno de los aspectos destacados del proyecto incluye la creación de nueve zonas de descanso y tres miradores, elementos diseñados para enriquecer la experiencia de los usuarios y ofrecer un espacio de reflexión y admiración del entorno.

Estos espacios están equipados con mesas de picnic, bancos y paneles informativos, algunos de los cuales son accesibles, garantizando que todos los ciudadanos puedan disfrutar de los beneficios de estas instalaciones. Entre los puntos más atractivos se incluyen intervenciones en el entorno del Puente Mantible y otras estructuras que poseen un notable interés histórico y arquitectónico.

A su vez, algunos de estos puntos se vinculan al enoturismo, al estar situados en áreas cercanas a viñedos reconocidos, incluyendo los de Luis Sáez y del Contino, lo que permite promover un turismo que resalta la riqueza vitivinícola de la región. También se han realizado esfuerzos para mejorar zonas con vegetación autóctona, como robles y enebros, preservando así el valor ecológico local.

Finalmente, el proyecto contempla la creación de un nuevo aparcamiento, que cuenta con capacidad para hasta 50 vehículos, así como espacios para motocicletas y bicicletas, facilitando el acceso a estas rutas para todos los ciudadanos, incluidas aquellas personas con movilidad reducida. Esta expansión de la infraestructura es un reflejo del compromiso de Logroño con la sostenibilidad y el bienestar de sus habitantes.