En el juicio del Caso Entrena, donde se acusa a O.P del asesinato de J.O en su casa, el abogado de la defensa, César Martínez, ha hecho énfasis en la falta de una mancha grande de sangre en el lugar del crimen para apoyar su teoría de que no ha habido asesinato.

En esta tercera sesión del juicio, un guardia civil del Equipo de Inspecciones Oculares del Servicio de Criminalística ha comparecido hoy para declarar. Durante el interrogatorio del abogado de la defensa, se cuestionó si había restos de sangre limpiados en el lugar donde presuntamente ocurrió el crimen, en la rampa de la cochera. El agente testificó que no había signos de sangrado importante y que la casa y la rampa estaban muy sucias. Sin embargo, se encontraron salpicaduras de sangre de la víctima.

El agente también destacó que, aunque había una mancha enorme de grasa de aceite de coche en la rampa, no se pudo inspeccionar. El abogado de la defensa quiso saber si los cadáveres sangran bastante, pero no se respondió a esta pregunta, ya que se consideró como una suposición.

O.P se enfrenta a más de veinte años de cárcel tras la desaparición y presunto asesinato de J.O.