En una contundente intervención, la portavoz del Grupo Parlamentario Podemos-Izquierda Unida, Henar Moreno, no se contuvo al criticar al presidente del Gobierno de La Rioja, Gonzalo Capellán, afirmando que su imagen de líder independiente es solo una fachada que oculta su verdadera lealtad hacia el Partido Popular, encabezado por Alberto Núñez Feijóo. Durante el segundo día del Debate sobre el Estado de la Región, Moreno expresó su desconfianza en la retórica del presidente, apuntando que sus acciones contradicen sus palabras.

Moreno, quien abrió el debate con una media hora de comentarios incisivos, afirmó que cualquier sorpresa en el discurso de Capellán sería la preocupación genuina por las problemáticas de la ciudadanía riojana. La diputada sostiene que el entorno de Capellán se alinea con la derecha más conservadora y que su gestión responde a los intereses de las clases privilegiadas.

Desde su posicionamiento crítico, Moreno subrayó que Capellán busca proyectarse como un defensor de los avances sociales, pero sus decisiones denotan lo contrario. Entre sus críticas se incluyeron las reformas fiscales que favorecen a las grandes fortunas y la promoción de la educación concertada, en un contexto en el que la sanidad pública se ha visto amenazada por políticas de privatización.

Para ilustrar la situación sanitaria, Moreno compartió el testimonio de un ciudadano que, ante la falta de disponibilidad en la sanidad pública para una operación de cataratas, se vio obligado a acudir a una clínica privada. La diputada cuestionó la inacción del Gobierno al respecto, especialmente en un momento en que la consejera de Salud hacía comentarios que la portavoz consideró absurdos, refiriéndose a vacaciones en lugar de operaciones necesarios.

Moreno también denunció que los problemas en el sistema de salud son evidentes, citando el desvío de emergencias a hospitales sin los recursos adecuados y el sufrimiento de pacientes que esperan horas en Urgencias. Según ella, estos son temas que Capellán dejó de lado en su anterior intervención, subestimando su gravedad.

Al reconocer la inteligencia de Capellán, Moreno mostró su desacuerdo con su llamado a unir fuerzas contra la violencia hacia la comunidad LGTB. A su juicio, un verdadero compromiso habría implicado una participación activa en las manifestaciones recientes y el desarrollo de la Ley Trans, que hasta ahora ha permanecido estancada en el olvido.

La dirigente de Podemos-IU destacó el urgido regreso de programas de educación afectivo-sexual, criticando la eliminación de iniciativas que son clave para combatir la discriminación. En el ámbito educativo, Moreno también se burló de los anuncios de nuevas infraestructuras que parecen lejanos a convertirse en una realidad tangible para los estudiantes.

Se dirigió a Capellán con reproches sobre las necesidades básicas que los padres plantean, como el transporte público para facilitar la comunicación con los docentes, y sugirió la implementación de refugios climáticos en las escuelas para ofrecer un alivio durante los meses de calor. Para ella, la falta de atención a la crisis habitacional es otro aspecto que refleja la desconexión del presidente con la realidad vivida por muchos jóvenes en la región.

Finalmente, enfatizó que el acceso a una vivienda asequible es un derecho que se está volviendo cada vez más inalcanzable. En su opinión, el "plan Revive" no aborda adecuadamente los desafíos que enfrentan las nuevas generaciones, perpetuando así una estructura de mercado que convierte la vivienda en un objeto de especulación más que en un hogar. Según Moreno, Capellán ha optado por defender a los mismos grupos que acentúan estas desigualdades en lugar de buscar soluciones efectivas.