En la mañana de hoy, el Paseo del Espolón ha sido el escenario de la celebración de los Santos Ángeles Custodios, patronos de la Policía Nacional, en un acto presidido por la delegada del Gobierno, Beatriz Arraiz, y el jefe de policía, Manuel Laguna.

El ambiente solemne, que desafió la amenaza de lluvia, vio la llegada de autoridades como el presidente del Gobierno riojano, Gonzalo Capellán, la presidenta del Parlamento, Marta Fernández, y el alcalde de Logroño, Conrado Escobar.

Beatriz Arraiz recibió el bastón de mando de manos del jefe de Policía y luego pasó revista a las tropas, mientras que los niños del colegio Bretón de los Herreros desempeñaron un papel destacado al portar la corona en el emotivo momento de recordar a los agentes fallecidos.

Se otorgaron condecoraciones al mérito policial a miembros de la Policía Nacional y a personas que han contribuido a mejorar la imagen de la policía, así como a integrantes de otras fuerzas de seguridad y a personas comprometidas con los valores de la Policía Nacional.

Se reconoció especialmente la operación conjunta 'Lirio-Montufar-Birra' llevada a cabo por la Policía Nacional, Guardia Civil y Vigilancia Aduanera, así como la colaboración de la Federación de Asociaciones de Vecinos de La Rioja, Empresa Prosegur y Empresa Alse Seguridad con la Policía Nacional.

Otras personas reconocidas incluyeron a la magistrada-juez Maria Teresa Mingor, el presidente de la Unión Deportiva Logroñés Félix Revuela, y el diseñador Eustaquio Uzqueda, entre otros.

La policía Desire Sánchez recibió una condecoración por su trayectoria profesional y expresó su orgullo y gratitud por la misma, destacando el desafío diario que representa su trabajo.

En su discurso, la delegada del Gobierno felicitó a todos los agentes en su patrón y subrayó la importancia de celebrar a los Ángeles Custodios en el Bicentenario de la Policía Nacional en 2024, así como de honrar a las víctimas del terrorismo.

Destacó la seguridad en Logroño, que se encuentra entre las capitales más seguras de España, y el papel fundamental de los policías nacionales en mantener la tranquilidad de la ciudad.

Antes del acto central, el obispo Santos Montoya presidió una función religiosa en la concatedral de Santa María de la Redonda, acompañado por el tenor Jacinto Salazar Romo.

Los eventos conmemorativos comenzaron el 30 de septiembre con una serie de conferencias, culminando el 14 de octubre con una ponencia sobre aeronaves no tripuladas por parte del inspector David Díaz de la Unidad Aérea de la Policía.