LOGROÑO, 5 de septiembre.

La Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño ha reafirmado su compromiso con la protección del patrimonio histórico-religioso tras el desgarrador colapso de la torre de la Iglesia parroquial de la Asunción de Nuestra Señora en Viguera, incidente que tuvo lugar el 23 de febrero. En un esfuerzo conjunto con el Gobierno de La Rioja y el Ayuntamiento de Viguera, se ha puesto en marcha un ambicioso plan para restaurar y revitalizar este monumento emblemático, que ostenta la distinción de Bien de Interés Cultural desde hace más de tres décadas.

Desde el siniestro, representantes de las tres instituciones se han reunido en múltiples ocasiones con el objetivo de investigar las causas del accidente y delinear un plan de acción que garantice una recuperación exhaustiva de la iglesia.

Un informe técnico reciente sobre el derrumbe ha determinado que la causa principal del colapso se debió a una infiltración de agua continuada, lo que ha sido considerado un factor externo y progresivo. Esta situación ha desterrado otras hipótesis como fallos de asentamiento o la presencia de un nivel freático activo en profundidad. El análisis geotécnico ha indicado que existía un relleno inestable y áreas con alta humedad que habían deteriorado subrepticiamente la base del muro, sin que se presentaran señales de advertencia previas al incidente.

Al mismo tiempo, las autoridades de la Diócesis, junto al Gobierno regional y el consistorio local, están liderando un proyecto de restauración integral que contempla no solo la reconstrucción de la torre, sino la renovación de toda la iglesia, incluyendo la reconfiguración del coro alto. Un equipo técnico multidisciplinar ha sido encargado de diseñar esta ambiciosa intervención.

El proceso de restauración se llevarán a cabo en cinco fases, las cuales incluirán desde la consolidación de muros hasta la mejora de los sistemas de drenaje, la construcción de un muro de contención, la restauración de las cubiertas y la preservación de bienes muebles. Se llevarán a cabo estudios arqueológicos e históricos, y se prevé la creación de una nueva torre, cuyo diseño será sometido a la aprobación del Consejo Superior de Patrimonio de La Rioja. Además, se han planteado acciones urgentes a corto plazo, como la vigilancia de grietas y la instalación de un campanario provisional para asegurar la funcionalidad del templo durante las obras.

Las instituciones involucradas han expresado su deseo de que la restauración se complete antes del 15 de agosto de 2030, coincidiendo con la festividad de la Asunción de Nuestra Señora, una fecha de gran importancia para la comunidad de Viguera.

En resumen, la Diócesis de Calahorra, el Gobierno de La Rioja y el Ayuntamiento de Viguera están colaborando estrechamente para lograr la restauración de la iglesia, con el fin de devolverle su esplendor y monumentalidad original, en un esfuerzo por resaltar y preservar la herencia cultural y espiritual de la región.