MADRID, 25 de diciembre. En un escenario preocupante y que golpea los bolsillos de los ciudadanos, el precio medio de la electricidad en el mercado mayorista ha experimentado un aumento del 36,7 por ciento este miércoles, coincidiendo con la celebración de la Navidad. La cifra alcanza los 100,94 euros por megavatio hora (MWh), según los datos provisionales proporcionados por el Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE) y recogidos por Europa Press.

Esta exorbitante escalada en el precio del 'pool' tiene claras repercusiones para los consumidores que se encuentran en el mercado regulado o PVPC, quienes sufrirán los efectos de las fluctuaciones diarias que caracterizan este mercado en constante vaivén.

El pico más alto del día navideño se presentará entre las 21:00 y las 22:00 horas, cuando el precio del MWh alcanzará los 141,08 euros. Por contraste, el precio más bajo se registrará entre las 4:00 y las 5:00 horas de esta mañana, situándose en 75,99 euros/MWh.

Comparativamente, este incremento es alarmante, ya que el precio medio de la electricidad será un 60 por ciento superior al mismo día del año pasado, 25 de diciembre de 2022, algo que pone de manifiesto la creciente presión económica sobre los hogares españoles.

Con este aumento, el precio de la luz vuelve a franquear la frontera de los 100 euros/MWh, después de varios días de estabilización, marcando su nivel más elevado desde el 20 de diciembre, lo que augura un invierno complicado para muchos consumidores.

A estos precios ya desorbitados se les deben añadir los costos fijos que enfrentan los consumidores eléctricos, que provienen de peajes, cargos y ajustes de sistema, lo que representa una carga adicional en sus facturas mensuales.

Es importante señalar que el 'pool' no refleja con exactitud el precio final de la electricidad para los usuarios acogidos a la tarifa regulada, ya que a partir de 2024 se implementará un nuevo método de cálculo del PVPC. Este nuevo enfoque incorpora una cesta de precios a medio y largo plazo, diseñado para mitigar las abruptas oscilaciones, al tiempo que mantiene las referencias de precios a corto plazo que pueden incentivar el ahorro y un consumo más eficiente.

Con este nuevo sistema, la relación con el precio del 'pool' se irá disminuyendo de manera gradual. Se prevé que de aquí a 2026, la influencia de los mercados de futuros pase a representar un 25 por ciento en 2024, un 40 por ciento en 2025 y culminando en un 55 por ciento a partir de 2026, lo que podría llevar a un cambio significativo en la forma en que los consumidores experimentan los precios de la electricidad en el futuro.