En Logroño, el control de los Vehículos de Movilidad Personal (VMP), como patinetes eléctricos y bicicletas, se intensificará durante febrero con multas de hasta 1.000 euros. Esta medida busca abordar un problema que ha generado quejas recurrentes entre los ciudadanos.

El concejal de Interior, Francisco Iglesias, junto con el comisario jefe de la Policía Local, Héctor Ruiz, han anunciado esta campaña especial para febrero con un enfoque más intenso, aunque el control de este tipo de vehículos se realiza durante todo el año.

La campaña se centra en la siniestralidad y los accidentes con VMP, con alrededor de 400 denuncias y 70 accidentes reportados el año pasado. Se busca que los conductores cumplan con las normas de tráfico, respeten señales y no circulen por zonas prohibidas.

La seguridad de los usuarios de VMP y bicicletas, especialmente en condiciones de poca visibilidad, también es una prioridad. Se verificará el uso de luces y prendas reflectantes, así como el cumplimiento de normativas de tráfico como evitar el uso de teléfonos móviles mientras se conduce.

La ordenanza municipal regula el uso de VMP en Logroño y establece requisitos como la prohibición de llevar a un pasajero en un patinete eléctrico, la obligatoriedad de llevar casco en ciertas situaciones y el cumplimiento de normas de tráfico para evitar conductas peligrosas.

El objetivo de la campaña es fomentar una movilidad segura y una convivencia adecuada entre peatones, vehículos, VMP y bicicletas. Se intensificarán los controles y las sanciones para abordar las conductas irresponsables de los usuarios de estos vehículos en la ciudad.

Se espera mejorar la seguridad y conciencia de los conductores de VMP, así como hacer cumplir las normativas vigentes para evitar comportamientos incívicos y riesgosos en las calles de Logroño.

La campaña de febrero se centrará en aplicar sanciones a las infracciones detectadas, con agentes de policía dedicados exclusivamente a vigilar el uso de VMP en la ciudad. Se prestará especial atención a áreas donde se observan mayores infracciones y peligros para los usuarios y peatones.

Los usuarios deben colaborar respetando las normas de tráfico y evitando comportamientos que pongan en riesgo su seguridad y la de los demás. Las multas por infracciones pueden variar desde 60 hasta 1.000 euros, dependiendo de la gravedad de la falta cometida.

Es fundamental la concienciación y el cumplimiento de las normas para garantizar una convivencia segura en las calles de Logroño y evitar accidentes y situaciones de riesgo.