El consejero de Hacienda de La Rioja, Alfonso Domínguez, ha hecho un llamado a la estabilidad y la confianza para el sector productivo de la región en medio de la reciente tensión causada por la política arancelaria estadounidense. Según Domínguez, la capacidad de exportación de las empresas riojanas es una de las grandes virtudes de la economía local y, a pesar de los desafíos impuestos por la administración de Trump, esta fortaleza perdurará.

En declaraciones durante un reciente encuentro con líderes empresariales, el consejero subrayó que el gobierno regional se compromete a colaborar estrechamente con las empresas afectadas, implementando medidas y apoyos que ayuden a mitigar el impacto de los nuevos aranceles. Domínguez enfatizó la importancia de mantener una comunicación constante con las empresas para comprender mejor las consecuencias de esta política en cada sector.

El encuentro, que previo a una reunión clave con figuras relevantes como el presidente de la Federación de Empresas de La Rioja (FER), Eduardo de Luis, tenía como objetivo realizar un análisis detallado de cómo los nuevos aranceles podrían afectar no solo a la economía en general, sino a empresas específicas. Domínguez indicó que han estado trabajando proactivamente en la identificación de posibles efectos desde que se dio a conocer esta decisión de Estados Unidos.

“Nuestra estrategia se basa en el diálogo constante con el sector productivo, que es la mejor forma de abordar los desafíos actuales,” destacó el consejero, resaltando la necesaria resiliencia del sector exportador riojano. Afirmó que las empresas locales han mostrado su fortaleza incluso frente a aranceles del 25% anteriormente, y que es esencial recoger información precisa sobre las dificultades que cada empresa podría enfrentar en este nuevo contexto.

Con una cifra cercana a los 2.400 millones de euros en exportaciones anuales, Domínguez mencionó que el 4.9% de estas operaciones se realizan con Estados Unidos, destacando a su vez que el sector agroalimentario, especialmente el vino, es uno de los más impactados debido a su alta cuota de exportación al país norteamericano.

El consejero reiteró la necesidad de seguir evaluando el impacto de las políticas arancelarias, indicando que el gobierno regional está dispuesto a hacer ajustes y ofrecer apoyo a todas las empresas que lo necesiten. “Pido calma, ya que la economía riojana es robusta y estamos aquí para respaldar a nuestras empresas en todo momento”, declaró.

Encaminando la conversación hacia la respuesta colectiva, Domínguez también hizo hincapié en la importancia de la acción a nivel europeo, instando a tener confianza en que la Unión Europea está trabajando para mitigar los impactos negativos que estas medidas arancelarias puedan generar.

Por su parte, el presidente de la FER, Eduardo de Luis, expresó su apoyo incondicional al gobierno regional en este esfuerzo para proteger a las empresas locales frente a los cambios en la política comercial. “El incremento de los aranceles solo se traduce en mayores costos para los consumidores y un obstáculo para el libre comercio, algo que siempre hemos defendido”, señaló de Luis.

En su reflexión, de Luis apuntó que el problema es de alcance europeo y no solo regional, sugiriendo que es crucial evaluar y respaldar las medidas que la Unión Europea adopte frente a esta situación. Reconoció que, aunque algunas empresas podrían verse afectadas, el volumen de exportaciones a Estados Unidos representa un pequeño porcentaje del total, lo que ofrece una oportunidad para diversificar mercados y buscar alternativas comerciales.

“Si llegamos a perder ese 5% en el mercado estadounidense, exploraremos nuevas vías y otros mercados que nos permitan seguir creciendo. Es fundamental que el gobierno apoye esta expansión hacia nuevas zonas comerciales,” concluyó de Luis, destacando un camino de resiliencia y adaptabilidad ante las adversidades.